Soy Siti, el hada que protege los trasteros junto a Yiunit, mi compañero elfo.

Los dos estamos en misión especial desde el país de los fiordos para contaros las mil y una aventuras que vamos viviendo en este "laberinto de pasillos en el que cada trastero tiene su historia... Nunca pensamos que el destino que nos fue asignado nos depararía tantas sorpresas :) y ahora estamos preparados para compartirlas....

Bienvenidos a nuestro mundo!

sábado, 23 de marzo de 2013

Historia Número 33...



"¡Ich werde dir die daumen drücken!"
 
“Cómo dices, Siti?”

“Nada, una frase que he aprendido en alemán y que me ha gustado su significado porque desea suerte..."

 

Hoy hemos conocido a Jana, que se ha pasado por el City en busca de un trastero. Nos ha contado que después de semana santa, se va a probar suerte a Berlín y necesita un lugar para guardar sus cosas.

La historia es que como no sabe exactamente como le irá, prefiere la solución intermedia de guardar sus cosas en un trastero y ya ver luego qué hacer…Es una genial idea, la verdad. Si al final, resulta que irse ha sido una gran decisión, las chicas de la oficina le han dicho que ellas mismas le organizarán el porte de sus cosas hasta Berlín y que no deberá preocuparse por nada pero si, por el contrario, decide volver al cabo de unos meses, se ahorrará el hecho de llevarse cosas que en un principio, no va a necesitar…

Por si acaso, Jana ha dicho que dejará el trastero con las cajas bien organizadas y se ha quedado súper tranquila sabiendo que en caso de que necesite alguna de ellas, puede contar con la ayuda de City y que en un par de días ya las tendría en su nueva haus, que es “casa” en alemán. En cuanto al idioma, Jana tiene algunas nociones gracias a un curso intensivo que ha hecho en la Escuela Oficial de Idiomas pero como sabe inglés, va más confiada en qué se las puede apañar hasta que tenga suficiente nivel de alemán que con la actitud positiva y valiente que tiene seguro que no tardará mucho en dominar!

Yiunit me ha dicho que Jana es un nombre alemán y esta tarde nos estábamos preguntando si el nombre ya fue una señal de donde le llevaría el destino… De hecho, filosofando un poco más…¿si se hubiera llamado Coriana, la vida le hubiera llevado al país de los croissants?..

Sea como sea –y se pronuncie:P- ...

Ich werde dir die daumen drücken, Jana!